Belgrano y los Pueblos Indígenas: una historia pocas veces contada

Este 20 de junio, Día de la Bandera, también es el del fallecimiento de Manuel Belgrano, un prócer generalmente retratado como militar o abogado, o –como hoy- el creador de la bandera argentina. Aunque todo eso es cierto, hay algo sobre él que pocas veces se cuenta: reconoció la injusticia en que vivían los Pueblos Indígenas y fue un precursor en materia de reconocimiento de sus derechos.

Este Hijo de la Patria, como prefería llamarse, murió con cincuenta años recién cumplidos, los últimos diez se los dedico a la Patria sin descanso. No solo le dio la bandera, también le entrego triunfos y derrotas, pero sobre todo un ejemplo de vida. Nacido en un hogar de alto nivel económico murió en la total pobreza.

Tras la Revolución en diciembre de 1810, redactó el “Reglamento para el Régimen Político y Administrativo y Reforma de los 30 Pueblos de las Misiones”, donde sentó su postura de reparación, que fue traducido al idioma guaraní. Este documento reconocía, a los “Naturales”, así nombraba a los indígenas guaraníes, como sujetos de derecho y afirmaba que todos “los Naturales” de las Misiones eran libres y podían disponer de sus bienes.

Como persona formada en derecho, reconoció los de los “Naturales” en ese documento que es base de la Constitución de la provincia de Misiones. Sin embargo, hasta el momento, no se reconocen los derechos indígenas en esa Constitución ya que la ley 4000 que los incorpora fue incumplida por varios gobernadores, que nunca llamarón al obligatorio referéndum.

En su escrito, Belgrano expuso el maltrato sufrido por los indígenas, dijo: “sirviendo únicamente para las rapiñas de los que han gobernado, como está de manifiesto hasta la evidencia” ordenó que se los respete, se les reconozca la propiedad sobre sus tierras, valorando su identidad y cultura. Además sugirió que tuvieran participación política en un futuro Congreso. 

En tiempos en que la discriminación y el despojo siguen vigentes, recuperar esta parte de la historia nos obliga a mirar el pasado con ojos críticos y el presente con compromiso.

Hoy, levantar la bandera argentina y recordar la historia nos obliga a defender los derechos de los Pueblos Indígenas que aún existen, como el Mbya Guaraní en Misiones, sin ello podremos tener una Argentina soberana, pero no justa.

“A consecuencia de la proclama que expedí para hacer saber a los naturales de los pueblos de Misiones que venía a restituirlos a sus derechos de libertad, propiedad y seguridad de que por tantas generaciones han estado privados, sirviendo únicamente para las rapiñas de los que han gobernado, como está de manifiesto hasta la evidencia, no hallándose una sola familia que pueda decir, éstos son los bienes que he heredado de mis mayores, y cumpliendo con las intenciones de la excelentísima Junta de las Provincias del Río de la Plata, y a virtud de las altas facultades que como a su vocal representante me ha conferido, he venido a determinar los siguientes artículos, con que acredito que mis palabras no son las del engaño ni alucinamiento con que hasta ahora se ha tenido a los desgraciados naturales bajo el yugo de hierro, tratándolos peor que a las bestias de carga, hasta llevarlos al sepulcro entre los horrores de miseria e infelicidad, que yo mismo estoy palpando con ver su desnudez, sus lívidos aspectos, y los ningunos recursos que les han dejado para subsistir”. -Reglamento para el Régimen Político y Administrativo y Reforma de los 30 Pueblos de las Misiones- Gral. Dr. Manuel Belgrano.

Deja un comentario